Tras varios meses sin actualizar este blog, por fin publico una nueva entrada, después de regresar de mis vacaciones en Galicia y cuando ya empezamos un nuevo curso escolar en la diáspora.
El volumen de trabajo habitual junto a nuevos e ilusionantes proyectos provocan que, sin olvidar aquello que realmente merece la pena: la familia y los amigos, el tiempo resulte cada vez más escaso.
Aunque no sé con qué frecuencia seguiré actualizando este blog, no me gustaría dejar (todavía) esta plataforma que pretende, con más empeño que éxito, recordar que somos muchos los emigrantes que seguimos fuera deseando volver.
La reciente evolución positiva del mercado laboral en España (que se relativizará en estas semanas debido a la habitual estacionalidad y precariedad de buena parte del empleo) provoca que la enorme cantidad de emigrantes que siguen en el extranjero tengan cabida o presencia en los medios de comunicación. Quizás la sociedad española se haya “acostumbrado” a que decenas de miles de sus jóvenes (universitarios) españoles estén trabajando, pagando impuestos y teniendo hijos en otros países, pero no sólo nuestros padres y familiares deberían ser conscientes de que el riesgo de que no volvamos es cada vez mayor si este éxodo cae en el olvido.
Mientras la CEOE advierte que en pocos años España será junto a Japón el país más viejo del mundo, nosotros seguimos condenando a nuestros abuel@s a tener con sus niet@s una relación digital. Tan triste como real, mis hijos ya comprenden que no se puede abrazar por skype y que los besos sobre la pantalla son mucho más fríos que los que damos en la piel.
No dejéis que se olviden de nosotr@s.
#queremosvolver
2 comentarios
Escriba un comentario →